Mad Cool Festival
El festival Mad Cool es uno de los eventos de música más importantes en España. Desde su primera edición en 2016, ha atraído a algunas de las bandas y artistas más importantes del mundo, y se ha convertido en un evento imprescindible para los amantes de la música en todo el país. El festival ha tenido lugar en el recinto de Valdebebas en las últimas ediciones, pero los organizadores han decidido trasladarlo a un terreno más grande entre el polígono industrial de Villaverde y la M-45 en Getafe para la próxima edición.
El nuevo emplazamiento del Mad Cool
El nuevo terreno que albergará al Mad Cool 2023 es más grande que el anterior y permitirá a los organizadores del festival aumentar el número de escenarios y de artistas. Además, el terreno está ubicado en una zona más alejada de las áreas residenciales que Valdebebas, lo que reduce el riesgo de que el ruido del festival afecte a los vecinos. Sin embargo, a pesar de estas ventajas, el traslado del festival también ha generado preocupaciones entre algunos vecinos del área.
El nuevo MadCool se ubicará en un solar de Villaverde junto a la M-45. La zona estará relativamente bien comunicada gracias al metro, cercanías y autobuses lanzadera.
Preocupaciones de los vecinos
Los vecinos de las áreas cercanas al nuevo emplazamiento del Mad Cool están preocupados por el ruido que generará el festival. Según los organizadores, el nivel del ruido no debería superar los 55 decibelios en las casas de alrededor, siempre y cuando se tengan las ventanas cerradas. Sin embargo, algunos vecinos temen que el ruido del festival sea demasiado fuerte y les impida dormir por la noche. Además, la ubicación del festival en un área industrial hace que los vecinos teman por la seguridad de sus hogares y la posibilidad de robos y otros delitos durante el festival.
Los planes de ‘soterramiento’
Para reducir el impacto acústico del festival en las áreas residenciales cercanas, los organizadores del Mad Cool han anunciado que planean ‘soterrar’ los escenarios principales entre 3 y 5 metros. Esto significa que los escenarios estarán ubicados en un nivel inferior al del terreno circundante, lo que reducirá la cantidad de ruido que se escape. Según los organizadores, esta medida debería ser suficiente para garantizar que el ruido del festival no supere los 55 decibelios en las casas cercanas.